Ya tenemos que empezar a despedirnos de los viñedos, del verano y del buen tiempo:
La etimología de Elciego no está clara, explican en la Wikipedia que pudiera venir de la combinación de encina con el sufijo -edo, y podría significar «el encinar».
Frikadas etimológicas aparte, fuimos a esta localidad por la buena oferta en electricidad, cobran dos euros por doce horas.
El pueblo es bonito, pero esa tarde de martes el casco antiguo estaba muy solitario. Recuerdo en especial las cintas del templete con los deseos de la gente en fiestas y la grandiosa iglesia con textos en rojo brillante y estructura peculiar. Algún día había visitas guiadas, pero no esperamos a ello, no teníamos intención de quedarnos mucho tiempo.
La zona más moderna -que tiene instituto, tiendas, dependencias del Ayuntamiento- sí tenía algo más de vidilla: algunas madres con sus niños, algún transeúnte aislado (que no puntual)… Para ser un pueblo de 1000 habitantes en otoño, me resultó algo desolado. Y ni siquiera hacía demasiado frío.
Se ven un montón de casas palaciegas bien cuidadas, y me preguntaba yo, ¿quién querría vivir aquí? Estas casas son frías, porque cuesta muchísimo calentarlas, poco iluminadas, poco accesibles, y seguramente protegidas por ser patrimonio. Me parecen muy incómodas, y si tuviera que vivir en una de ellas, creo que la vaciaría por dentro para crear espacios amplios y la llenaría de pantallas y luces LED simulando ventanales. Esto son idas de pinza por ver series futuristas y apocalípticas.
Podría comentar alguna cosa turística, como que Elciego tiene una bodega que recuerda al museo Guggenheim de Bilbao y es que están diseñados por el mismo arquitecto, Frank Gehry. También hay un mural muy chulo que no vi hasta que dejamos el pueblo, y por lo menos un caché, que no encontré, porque se me hizo de noche o porque solo encuentro los sencillos. Mola que un sitio tenga cachés, muchas veces te llevan a ver sitios bonitos.
La iglesia tiene elementos que me resultan interesantes: una galería de piedra, que me resulta curiosa aunque he visto cosas así en más sitios, como en Ezcaray. Las torres que no son cuadradas, sino que tienen ¿cinco, seis lados? y la decoración con borlas… Un edificio interesante. Después de visitarlo, leí la completa descripción de la Wikipedia (lo sé, se hace al revés), y me quedé con ganas de visitarlo de nuevo para observar con detenimiento todos los detalles.
Podria comentar estas cosas, pero esto no pretende ser una guía de viajes, para eso hay infinitos blogs. Yo sólo escribo mis percepciones, y como ejercicio: para escribir, para recordar, y para intentar mejorar la perseverancia.
Navarrete también tiene cositas para descubrir. Para empezar, me sorprende el gran polígono industrial, y es que es una localidad grande, tiene 3000 habitantes. Tiene calles que son casi túneles, una aventura de scape room para peregrinos, la gran iglesia con música, eso me ganó. Estaba un poco oscura, pero era muy rica, y tenía bastantes explicaciones, como el camino ignaciano, que realizó San Ignacio de Loyola. También había una exposición de ropas ceremoniales, pero eso nunca me ha parecido interesante.
La oficina de turismo no cumple su horario, y eso que Navarrete no es uno de esos pueblos pequeños donde las cosas abren si llamas por teléfono. Me explico: en algunos lugares hemos encontrado que hay establecidas horas de visita, pero si nadie ha hecho una reserva, no hay nadie para abrir, se confía en que el interesado llame cuando vea que no hay nadie. No se puede ir con mentalidad acelerada de urbanita. Es como ir a la India, no puedes visitar aquello igual que si fueras a Bruselas.
Las calles a diferentes niveles es algo que llevamos viendo desde Haro. He vivido toda la vida en una ciudad muy llana, y me llama la atención encontrar edificios donde la entrada no está a nivel de suelo o calles a diferente nivel.
Por concluir, dar las gracias al Ayuntamiento de Elciego por su iniciativa con el área de autocaravanas. Es una manera fácil y barata que tienen los pueblos del interior de conseguir turismo. Sino, no hubiéramos ido nunca allí.